Os debía la receta de este pollo a la miel y mostaza. Desde que compartí con vosotros una foto en Instagram que la tenía pendiente. Y es que muchos de vosotros me pedisteis la receta.
En casa es raro la semana que no comemos pollo y por eso intento ir variando la receta, para que nadie se queje de que hay lo mismo para cenar.
Reconozco que si les doy a elegir a ellos siempre van a decir que quieren pollo rebozado, pero eso no puede ser, así que voy buscando opciones un poquito más sanas.
Como éstos muslitos que están realmente deliciosos, si os apetece probarlo os dejo la receta!
Ingredientes:
8 muslos de pollo
100 g de miel
40 g de mostaza antigua
150 ml de caldo de pollo
Sal
Pimienta
Aceite de oliva
Ponemos una sartén al fuego y cubrimos el oído con el aceite de oliva.
Lavamos los muslos y los salpimentamos.
Los freímos en el aceite bien caliente. No hace falta que se hagan por dentro, solo hay que dorarlos, se acabarán de hacer al horno.
Reservamos en un plato cubierto con papel de cocina para que absorba todo el aceite sobrante.
Precalentamos el horno a 180 grados.
En un bol mezclamos la mostaza y la miel.
En una bandeja apta para el horno disponemos los muslos de pollo y pincelamos con la mezcla de mostaza y miel.
A continuación vertemos por encima el caldo.
Tapamos con papel de aluminio y lo llevamos al horno durante unos 25 minutos. Le damos la vuelta a los muslos, regamos con el caldo que está en la bandeja y volvemos a llevar al horno sin tapar durante otros 10 o 15 minutos más para que se acaben de dorar.
Sacamos del horno y lo servimos con arroz basmati y un poco de bimi salteado con salsa teriyaki. A disfrutar!!
Crear recetas con miel agrega dulzura y salud a la cocina. Este tesoro natural realza sabores, aporta beneficios nutricionales y añade una pizca de magia dorada a cada plato.
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