Buenos días!!
A petición popular, (mamás del cole del Marc), os pongo la receta de como hago los muffins salados. La receta la encontré hace mucho tiempo y no recuerdo donde, así que no se a quien atribuirla.
Muffins de tomates confitados, queso de cabra y orégano
Para unos 16 muffins:
3 huevos
90 ml de aceite de oliva
375 ml leche
375 gr de harina
1 sobre de levadura en polvo
75 gr de tomates confitados en aceite
1 rulito de queso de cabra (de unos 100 grm)
Orégano, sal y pimienta.
Preparación:
Antes que nada hay que recordar que para hacer muffins hay que tener los ingredientes a temperatura ambiente (sacarlos por lo menos una hora antes de la nevera).
Segundo paso antes de ponerse con las manos en la masa (que luego con las manos en la masa cuesta un montón) encentemos el horno al máximo, mientras que preparamos los muffins.
Escurrir bien los tomates (yo los presiono entre dos capas de papel de cocina) y los cortamos en trocitos pequeños. Algunos (unos 16, ostras !! igual que los muffins, jejeje!!) los reservamos para la decoración.
Cortamos el queso de cabra (es lo único que no tiene que estar a temperatura ambiente, ya que si está caliente no se puede cortar) en daditos y reservamos otros cuantos (16 más) para decorar.
Y ahora empezamos de verdad. Pesamos y reservamos todos los ingredientes, para tenerlos a mano.
En un bol batimos los elementos líquidos: los huevos, luego la leche y por último el aceite. Mezclar bien.
En otro bol a parte mezclamos los elementos sólidos: la harina (yo la tamizo), la levadura, el queso los tomates, la sal, la pimienta y el orégano. Lo removemos hasta que esté homogéneo.
Añadimos los ingredientes líquidos a los sólidos y lo mezclamos con muy pocos movimientos para que cuando nos los comamos mantengan la esponjosidad.
Cogemos un molde para muffins y le ponemos sus cápsulas. Si no tenéis hay que poner un poquito de aceite en el molde para que luego no tengáis que comeros los muffins con cápsulas de silicona. Los rellenamos con nuestra masa hasta unos tres cuartos de capacidad (yo siempre les pongo un poquito más). Encima le ponemos un par de trozos de tomate (aquellos que teníamos para decorar), un trozo de queso de cabra (intentar que no quede cerca del borde, porque al deshacerse se puede enganchar la cápsula con el molde) y un montoncillo de orégano para darle color.
Bajamos la temperatura del horno hasta los 160º y metéis el molde. El tiempo de cocción depende del horno de cada uno, más o menos son unos 20 minutos. Pero mi horno es bastante viejito y le cuesta más. Así que yo me guío por el colorcillo dorado y por una aguja que tengo y que me sirve para controlar que no estén crudos.
Cuando los saquemos del horno los dejamos enfriar unos 10 minutos en el molde. Luego los sacamos y los dejamos enfriar en una rejilla hasta que estén fríos (aunque a mí, particularmente, me encantan tibios). Para los que no tenemos rejillas para enfriar los postres, os diré que yo lo que hago es coger la rejilla del horno y un bol puesto boca abajo, y apa, ya tenemos nuestra rejilla.
Los rellenos de los muffins son infinitos y solo dependerá de vuestros gustos. Yo hice estos y otros de bacon con nueces y sésamo. Ideales para un pica-pica, acompañar con ensaladita y un vinito blanco, esto ya depende de cada uno.
Ya sabéis, si os animáis me lo contáis!!!!
Aquí os dejo el testimonio gráfico de los míos
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Estas son las banderitas que desaparecieron?!?!? Llamaremos a Iker!! |
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Muffins de bacon y nueces |
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Muffins de tomates confitados, queso de cabra y orégano |
Besos
I.