Crema de cebolla caramelizada y beicon

 

Creo que no hay ninguna crema que no me guste, o por lo menos aún no la conozco. En casa las hacemos de cualquier verdura por separado. De calabacín, guisantes, zanahorias, setas, puerros... son todas realmente deliciosas. 

Y no se porqué por aquí no tengo subida casi ninguna, y es raro teniendo en cuenta que durante los meses más fríos en mi casa un día a la semana siempre se toma crema. 

Así que me he puesto manos a la obra y aquí tenéis la primera. Esta deliciosa crema de cebolla caramelizada con beicon. Es una crema suave y dulce que mezclada con el crujiente y salado del beicon no puede estar más buena. 

Si queréis probarla, tomad nota: 

Ingredientes 

1 kg de cebollas 

200 ml de caldo 

175 ml de crema de leche 

una cucharada de azúcar

sal 

pimienta

Para los toppings 

beicon 

1 cebolla 

1 cucharadita azúcar moreno 

1 cucharadita vinagre de Módena

Precalentamos el horno a 220 grados.

Cortamos las cebollas a gajos, sin pelarlas y las ponemos en una bandeja de horno cubierta con un papel. 

Regamos las cebollas generosamente con aceite de oliva y salpimentamos. Espolvoreamos una cucharada de azúcar. 

Tapamos la bandeja con papel de plata y llevamos al horno durante una hora. 

Pasado ese tiempo, lo sacamos del horno y veremos que nuestras cebollas ya están caramelizadas. Ahora será facilísimo pelarlas.

Ponemos las cebollas peladas en el bol de la batidora junto con la crema de leche, el caldo, sal y pimienta. Batimos bien.  

Para hacer la cebolla caramelizada, pelamos y cortamos en juliana una cebolla y la pochamos en una sartén con una cucharadita de aceite, a fuego bajo. La dejamos sofreír unos 15 minutos. Pasado ese tiempo añadimos una cucharada de azúcar moreno. Dejamos que pasen cinco minutos más y añadimos la cucharadita de vinagre de módena.  Dejamos un par de minutos más y reservamos. 

Para hacer el beicon con la menor cantidad de grasa posible vamos a hacerlo al horno. Ponemos el beicon sobre una rejilla y una bandeja de horno debajo donde irá cayendo el aceite sobrante. Lo horneamos 15 minutos a 180 grados o hasta que esté tostado. 

Y ahora ... a disfrutar!!